Raimundo Ongaro, líder histórico del gremio gráfico, ex Secretario General de la CGT de los Argentinos, ejemplo de lucha y dignidad del sindicalismo argentino, falleció el lunes 1 de Agosto a la edad de 91 años.
Con la Lista Verde de los Gráficos alcanzó la Secretaría General de la Federación Gráfica Bonaerense en 1966, y a pesar de las persecuciones, la cárcel o el exilio, jamás perdió el liderazgo de su gremio.
En 1968 encabeza la CGT de los Argentinos. Su Programa del 1º de Mayo de ese año y el Semanario CGT dirigido por Rodolfo Walsh, son dos hitos en la historia del Movimiento Obrero Argentino. Después del Cordobazo comienza su larga serie de detenciones; en Devoto comparte la celda con Agustín Tosco. Encarna la lucha de los trabajadores por el retorno de Juan Domingo Perón a la Argentina.
Luego del fallecimiento de Perón y por llevar adelante las justas reivindicaciones de los gráficos, es nuevamente encarcelado y la Federación Gráfica Bonaerense disuelta. En Mayo de 1975, estando detenido en el penal de Devoto, la Triple A asesina a su hijo Alfredo, partiendo al exilio que duró hasta el retorno de la democracia.
En 1984, siempre con la Lista Verde, recupera la conducción del gremio y jamás la abandonaría. En Abril de este año cedió la Secretaría General al compañero Héctor Amichetti.
Jamás abandonó los ideales de Liberación Nacional y Emancipación Social que guiaron su vida. La sencillez de su vida cotidiana en su casa de Los Polvorines es la muestra de una honradez que lo acompañó hasta el último día de su vida.